miércoles, 19 de diciembre de 2012

miércoles, diciembre 19, 2012 - , 2 comments

5. Primer gran paso en la investigación: ¿Qué se cocía en el horno?

Tengo que reconocer que todo era bastante desesperanzador: "Es un horno muy extraño y está en pésimo estado de conservación, es casi imposible que encuentres paralelos", decían unos; "Tenemos que esperar a las pruebas de radiocarbono para datar la estructura. Hasta entonces: nada.", decían otros. Ante este panorama, ¿cómo continuar investigando? ¿Debía quedarme sentado a verlas venir, como quien dice?

Era hora de aplicar un método made in me que en otras ocasiones ya me había dado resultado. ¡Apuntad! Consiste en dar vueltas por la red de redes, buscando noticias, textos, artículos, libros, etc., en los que ir revisando cientos de imágenes que puedan interesarte. ¿En qué formatos? En .html, .pdf, .doc, .loquetesalgadeahímismo,... La cuestión es liarte la manta a la cabeza y ver cuantas más, mejor. Es clave intentar observar sólo las imágenes y los titulares "más gordos": posteriormente, eso nos ahorrará mucho tiempo y nos permitirá discriminar entre qué leer y qué no. En realidad, se trata de otra de las muchas cosas que le debo a la carrera de Historia del Arte, a lo largo de la cual he tenido que trabajar continuamente con imágenes y, te pongas como te pongas, la jodida te pone una pistola en la cabeza para que desarrolles ampliamente la capacidad de observar diferencias y similitudes gráficas entre ejemplos muy similares.

Pues bien, ahí me teníais, una tarde de resaca post despedida de soltero (¡No, no! ¡No me habléis de bodas! ¡Es que se iba por siempre mi compañero de piso que, técnicamente, estaba soltero!), dando vueltas a golpe de clic por Google: "hornos romanos", "horno antiguo", "hornos de cerámica medievales", "horno edad media cerámica", "forn romà"...

Un horno hallado hace poco en Moixent que es sorprendentemente parecido al de Montesa...

¡Y zas! Tras ver montones de imágenes de hornos de todo tipo y época, comencé a percatarme de...  [...Esta parte del texto está oculta, de momento...]  

Jaume Coll consideró que lo que proponía era "lo más lógico" y, además, me dio una lista de detalles sobre mi horno que le cuadraban mucho más con esta interpretación:

Lo que todavía no podemos decir es si es un horno íbero, romano o del siglo XVIII -para ello hace falta continuar más profundamente con la investigación y esperar a los análisis de carbono 14 que puedan datar los restos de carbón recogidos-. Pero lo que sí creo que puedo decir, a día de hoy, es que he descubierto que [...de nuevo, tengo que guardar silencio en este sentido...]



Imágenes: El forn de Moixent